Nuestro columpio ya acabado.

El otro día el motor de nuestro coche nos dijo adiós, y teníamos tanto cariño al coche por su historia que no nos queríamos desprender del todo de el, y aprovechando que teníamos un cachito de jardín inutilizado, pensamos en darle vida para los peques de la casa y no tan peques.

Fuimos a comprar unos hierros en buen estado que aguantaran bastante peso, unas cadenas para sujetar el "columpio" y nos pusimos manos a la obra. 

Con paciencia y ayuda cortamos el coche a la mitad mas o menos, dejando algo mas de tejado para que diera sobra, y no mojarnos en caso de lluvia. 

Arreglamos y limpiamos bien los asientos, pintamos la carrocería y pusimos unas bonitas ruedas.

mientras los hombre de la casa iban poniendo los hierros en su sitio para hacer la estructura, para evitar posibles accidentes.

Cuando estaba ya el coche a punto y la estructura bien soldada y fijada el suelo, solo faltaba montarlo. Así que  llamamos a algunos vecinos para la ayuda de poner el coche. Y una vez puesto llamamos a los pequeños granujillas de la casa para que vinieran a ver su nuevo regalo y nosostr@s ver sus caras de asombro. No fue tan difícil solo hace falta paciencia y buena maña. Gracias